domingo, 21 de marzo de 2010

¡No me hables de dios cuando en realidad me hablas de estupidez!

Sencillamente, para tod@s aquell@s telepredicadores puerta a puerta.
Por un despertar, inusual, a un segundo en su inteligencia.

3 comentarios:

Dandelis dijo...

¡Bienvenido a la blogosfera! Si es que ya lo decía yo... que estabas tardando mucho en abrir un blog. ¡A ver qué material de lectura nos proporcionas! ¡Ah! Y no te sientas obligado por contar algo sólo porque tienes un blog; habla de lo que quieras y cuando quieras, que yo lo leeré igualmente ;-)

Unknown dijo...

Enserio te siguen tocando los predicadores en tu casa?? están todos en Telde o qué? Porque aquí, como mucho, vienen a ofrecerme alguna revista o almanaque, religioso, sí, pero nunca me intentan comer el coco.

Marc Allgood dijo...

Supongo q es por mi descaro a la hora de rechazarlos... que se ofenden o algo... Puede que atacarles directamente a sus convicciones sea la causa de sus reacciones contra mí.
Eso si... a mi me divierte mucho jugar con cada palabra para conducirlos a un túnel sin salida. ^^

Y nada Dani, si te fijas estuvo el blog hecho casi una semana porque no sabía ni tenía que decir... las cosas vendrán solas, eso sí tomo nota del cosnejo igualmente.

!Un saludo!

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